Esta
iniciativa, con Mónica Tonna a la cabeza, está enmarcada dentro de un programa
de ayuda sostenible a este orfanato en el que incluye el apoyo económico, social
y de ayuda a estos niños hasta su
incorporación a la universidad o a un trabajo con el que puedan subsistir en el
futuro y en su propio país, evitando así ese terrible éxodo a otros países que
contemplamos demasiadas veces y creando
valor en su propia tierra